Un equipo de científicos estadounidenses anunció la creación de piel resistente a gérmenes, que en el futuro podría salvarles la vida a víctimas de quemaduras graves. La utilización de células cutáneas modificadas por vía genética puede ayudar a reducir el riesgo de infecciones, mejorar la capacidad de supervivencia de los injertos y reducir la dependencia de antibióticos, dijeron los investigadores. El equipo, de la Universidad de Cincinnati, añadió células modificadas a sustitutos cutáneos cultivados en el laboratorio, lo que resultó en la eliminación de más bacterias que con la piel normal. Esto se debió a que las células transformadas genéticamente producían mayores niveles de una proteína llamada HBD4, que existe en el cuerpo como parte de su sistema natural de defensa. La bacteria que utilizaron en los ensayos, pseudomonas aeruginosa , se encuentra comúnmente en los hospitales