Un estudio descubrió que las secreciones de la piel de una rana sudamericana podrían ser utilizadas para tratar la diabetes tipo 2. Se trata de la rana llamada paradójica, se le llama de esta manera porque conforme se desarrolla reduce de tamaño y el renacuajo es cinco veces más grande que sus padres. Investigadores de las universidades de Ulster y de los Emiratos Ãrabes Unidos descubrieron que el pseudin 2, una secreción que protege al anfibio de las infecciones, estimula la producción de insulina en células pancreáticas analizadas en el laboratorio. Lo más importante es que no se produjeron efectos tóxicos en las células. Además, la versión sintética del pseudin-2 probó ser más efectiva para estimular la liberación de insulina que el compuesto natural de la rana. Hace tiempo se encontró la exendina, la cual es una sustancia en la saliva de un lagarto, que de acuerdo con la doctora Adela Rovira, vicepresidenta de la Sociedad Española de Diabetes y autora del libro ‘Todo para la diabetes’, tenía los mismos efectos. La exendina fue descubierta en la saliva del monstruo de Gila, un lagarto que habita en el suroeste de Estados Unidos y al norte de México. La Organización Mundial de la Salud indica que unos 195 millones de personas padecen diabetes en el mundo y la mayoría sufre diabetes tipo 2.