En 1456 el Papa Calixto III excomulgó al cometa halley por considerarlo un emisario del mal. En 1879 fue introducida a USA una sustancia para tratar la adicción a la morfina: la cocaína. Carlos VII dejó de comer y murió de inanición por temor a ser envenenado. Marconi, inventor del telégrafo, trabajó en un sofisticado aparato que pretendía grabar voces del pasado. Su principal objetivo era oír las últimas palabras de Cristo. El rey Gustavo III de Suecia estaba convencido de que el café era un veneno. Para demostrarlo, ordenó a un reo tomar café todos los días y a otro tomar té. El experimento, que fue seguido por una comisión médica, fue un fracaso: los primeros en morir fueron los médicos, después el rey, muchos años más tarde el condenado a beber té y por último el bebedor de café.