La nueva producción de James Bond tuvo que enseñar a Daniel Carig a manejar coches de velocidades, pelear, usar armas, lo puso a dieta y le quietó el miedo al agua, y ahora tiene que enfrentar un nuevo problema con todo el equipo. Resulta que los técnicos, empleados de producción y actores de Casino Royale se niegan a filmar una escena dentro de un avión ya que aseguran hay fantasmas. Las escenas se realizarían dentro de un jumbo decomisado por las autoridades británicas y se encuentra en el Aeródromo de Dunsfold, y ahora aseguran que dentro de el vive el espíritu de una mujer que murió de un ataque cardiaco dentro del mismo. “Se nos pidió que durmiéramos ahí para filmar una escena, pero muchos dentro de la producción y actores nos negamos por el fantasma. Fue un verdadero problema”, declaró una fuente cercana a la filmación. Por su parte, el portavoz del Aeródromo de Dunsfold, David McAllister, aclaró estar “en conocimiento de que ese avión está encantado”.