El hecho ocurrió el año pasado, cuando el acusado paseó con la supuesta víctima, con la que le unía una relación de amistad, y después ambos se desplazaron, como en otras ocasiones, a una casa abandonada situada en la localidad argentina de Benicarló, donde había residido anteriormente el procesado. Al parecer, una vez allí, se dirigieron a una habitación y el individuo, como había hecho otras veces, cerró la puerta con un candado y una cadena para que no les molestaran. Fue allí que le propuso a la mujer mantener relaciones sexuales y ante su negativa, la “tiró violentamente encima de una de las camas” de esa habitación, al tiempo que ella volvía a negarse, a lo que el procesado le dijo “que lo harían a las buenas o a las malas”. Cuando la supuesta víctima le dijo que “ya que iba a abusar de ella, al menos se pusiera un preservativo para no dejarla embarazada”, el acusado utilizó el plástico de un paquete de tabaco y lo utilizó a modo de profiláctico.