Varias rayas fueron encontradas en Australia muertas y con sus colas cortadas, llevando a algunos a temer que los fanáticos del recientemente fallecido naturalista Steve Irwin podrían estar cobrando venganza por su muerte. Irwin, un personaje de la televisión de ese país conocido como el “cazador de cocodrilos” murió durante una expedición de buceo en la costa australiana cuando una raya le enterró un aguijón en el pecho. Desde entonces, diez rayas han sido encontradas mutiladas en las playas de la región de Queensland, en Australia. Funcionarios gubernamentales dijeron que estaban investigando las muertes y que podría haber procesos judiciales contra los involucrados. Dos rayas fueron encontradas en una playa al norte de la ciudad de Brisbane con sus colas cortadas, mientras que ocho fueron halladas en otra playa el lunes pasado, indicó el diario local The Australian. Wayne Sumpton, del departamento estatal de pesca, sostuvo que no era claro si los incidentes estaban relacionados con la muerte de Irwin. Agregó que a veces los pescadores quienes accidentalmente atrapaban a rayas les cortaban las colas para evitar su picadura, pero que esa práctica era poco común. “Proteger la vida silvestre” Michael Hornby, un amigo del naturalista muerto y director ejecutivo del fondo “Guerrero de la Naturaleza”, de Irwin, condenó cualquier acción de dar muerte a animales en venganza por el fallecimiento de Irwin. “Queremos que quede muy claro que no aceptaremos ni respaldaremos a nadie que haya tomado alguna forma de represalia. Eso es lo último que Steve querría”, agregó. “Espero que todos entiendan que hay que proteger a la vida silvestre ahora más que nunca. De eso era de lo que Steve se trataba”. Las rayas son normalmente plácidas, pero cuando se sienten amenazadas, despliegan en su cola un aguijón afilado y venenoso. Fuente: BBC